martes, 31 de agosto de 2010

Diario querido


No sé cuántas personas cargo al mismo tiempo... tantas caras prácticas, felices, buenas amigas… las caras de mausoleo, las de ansiedad, las de inquietud… Mis otras vidas hacen trucos y saltan del pasado, me vuelven tierra, me quitan o me dan aire, me hacen beber de la lluvia andina , me dejan sin memoria, me atan a un tren que corre entre calles plagadas de tráfico y murmullos, no me dejan gritar, no me dejan estar del todo triste..


No sé si esto es una excusa para no sentir dolor, para quitarme la virtualidad de encima y volverme carne, para lamerle la miel a las raíces del destino…

Que irónico extrañar la calma, pero que bueno no sentirme muerto.

1 comentario:

Incrustada dijo...

Es como si indagaras mi cerebro. Como si me robaras una a una las palabras.

Efectivamente, YO así me siento.




Y me dan ganas de adueñarme de lo que decis. De ponerle imágenes.



Te quiero hermanito.
Te quiero.